Para un segundo, nuestro tiempo ya no es nuestro Sin quererlo nos lo roban mientras trafican con nuestra atención Somos espectadores inconscientes de una distracción constante ¿Cuántas cosas tienes entre manos ahora mismo? ¿Cuántas están brillando a tu alrededor pidiendo que las mires? ¿En cuántas otras estás pensando? ¿Y cuántas son tan importantes como para impedir que estemos aquí y ahora, tú y yo? A lo mejor no puedes, pero, si te lo pido ¿Puedes escucharme? Escucharme aquí y ahora, que es donde realmente estamos Pero vivimos como si el presente no nos perteneciera Como si nos lo hubieran arrebatado a golpe de estímulo, de ilusión vacía De producto que consumimos, pero que en realidad nos consume A lo mejor no puedes, pero, si te lo pido ¿Puedes escucharme? Volvamos al presente Todo a nuestro alrededor es consumo de contenido, pero ¿lo elegimos? Tenemos tanto que oímos, pero no escuchamos Y solo cuando escuchamos de verdad es cuando puede que algo cambie dentro de nosotros La música es nostalgia, desarraigo, vacío, emociones compuestas de otras emociones La complejidad de estar creciendo mientras escuchamos canciones Puede que estemos en ese lugar, en ese instante en el que sin darnos cuenta Algo está cambiando dentro de nosotros Una manzana tarda unos 150 días en madurar y caer del árbol Dulce y preparada para echar raíces 150 días y un instante para golpear el suelo Ahora imagina que eres la manzana cayendo, libre, en el aire E imagina que este momento, que esta música, que este disco, es este instante ¿Me escuchas?