En una cruz te entregaste Por amor a mí Alto precio pagaste por la humanidad Resucitaste en gloria y poder Ni la muerte pudo detener Alto y sublime reina en majestad El cetro de justicia en su mano está De su boca una espada sale con poder Y a las naciones juzgará En una nube blanca volverá Y a su novia viene a buscar Los muertos en Cristo resucitarán Y para siempre con Él vamos a morar Toda rodilla ante Él se doblará Toda lengua tendrá que confesar Jesucristo es rey por la eternidad Alfa y omega, principio y final