E                     C#m                  G#m               A
Salen como dos de la clase, no aprendieron nada, bajan la mirada
             E                       C#m                G#m             A
Al cruzarse bailan al compás de los locos, son solo palabras, miran la ventana
A                  C#m     G#m                   C#m     B
Suerte, lo mío es suerte, soy en todo esto espectador
E                     C#m                         G#m                    A
Ya no queda nadie tras la valla, quién se acerca a quién, hoy le toca a él


              C#m
Intercambian cartas, preguntan cómo será eso del sexo
   G#m                                         A
Y miran los labios de ella, como miran los suicidas, por la ventana del avión
        C#m
No pasa nada tan solo son los hijos del amor
    G#m                                          A
más puro, no puedo ni moverme se me incendia el alma.


          E                                            C#m
Llegan a casa, no prueban ni bocado, los dos ya están llenos
                                    G#m                A
Suben al cuarto a navegar sobre su espalda, te quiero amor
          E                                        C#m
Suplican calma, al corazón para que no le de una huida
                                 G#m                                      A
Se tiran besos por la cámara y espantan el tiempo demasiado largo hasta mañana


A            C#m
Y aquí me detengo
A            G#m          B
Os deseo el viento y a volar

           C#m                                       G#m
Marcharos lejos, estáis a tiempo de largaros de este mundo
                                       A
Que no está hecho para el corazón por fuera
            C#m                                       G#m
Cerrar las puertas, que nadie entre apagando así el incendio
                                 A
De la pureza de dos cuerpos y mentiras
           C#m                                        G#m
No quiero veros, y que no os cuenten cómo funciona la vida
                                      A
Cruzar el charco que son solo seis caricias.