Negros nubarrones, Luna llena amarillenta
Viento entre los árboles, chispazos de tormenta
Vuelan las cortinas como faldas de un fantasma
Ruidos o cadenas, pero a mí me da lo mismo

Apagón de luces, un reloj que da las doce
Un aullido ronco que parece que maldice
Suena la campana entre la niebla y el abismo
Noche tenebrosa, pero a mí me da lo mismo

Miedo, nunca, nunca, nunca tengas miedo
De verdad, que nunca pasa nada
Aunque el Conde Drácula te siga
Y un fantasma te persiga
Y una bruja diga

Miedo, nunca, nunca, nunca tengas miedo
Aunque un esqueleto te dé un susto
Aunque el hombre lobo te sonría
Y un murciélago bromista te siga a la pista

Una puerta se abre sola, y el salón a oscuras
Se mueven los ojos de un retrato, qué locura
Vuelan por los aires libros viejos de exorcismo
Una carcajada, pero a mí me da lo mismo

De repente suena solo el piano de la sala
Un golpe o un viento apaga el fuego de la vela
Tiembla el suelo como si empezara un cataclismo
Yo no tengo miedo, porque a mí me da lo mismo

Miedo, nunca, nunca, nunca tengas miedo
De verdad, que nunca pasa nada
Aunque el Conde Drácula te siga
Y un fantasma te persiga
Y una bruja diga

Miedo, nunca, nunca, nunca tengas miedo
Aunque un esqueleto te dé un susto
Aunque el hombre lobo te sonría
Y un murciélago bromista te siga a la pista

(Miedo)
Fuera el miedo
(Miedo)
Fuera el miedo
(Miedo)
Fuera el miedo
(Miedo, miedo, miedo, miedo, miedo, miedo, miedo, miedo)