Hay que levantarse y salir a la calle
para ver que todos los días las cosas no son iguales,
tu cara de alegría no es la misma que la mía,
ayer yo así sufría y vos ni lo sentías.
En cada paso ver la novedad,
de la esquina, de la gente de lo que está por pasar.
No poner la vista baja por si la tierra se raja,
es mejor mirar en alto y que venga el sobresalto.
Es mentira la rutina, por más que uno se convenza,
es verdad la variedad de la calle al pasar.
Todo el tiempo todo cambia, todo pasa y no retrasa,
si ves que ahí viene el tren que tu calle sea el andén.

No sentís como se mueve, cuando hay sol y cuando llueve.
Hay que poder ver lo que uno quiere ser,
en el tiempo que hoy corre el mañana es el ayer.

Ansiedad de tener todo en mis brazos,
de sumar en cada paso algo nuevo a mi placard.
Hurgar en la suciedad, la pobreza, el desencanto,
que ahí no hay solo llanto y si hay mucha verdad.
No quiero sumar en oro lo que hoy le resta a otro,
yo busco otra mercancía más valiosa cada día.
Lo mío vale más caro, quizás sea por ser raro,
lo que yo puedo encontrar, no es muy fácil de mirar.
Yo no compro tu discurso porque sé que en el transcurso,
todo eso se evapora si no haces valer tu hora.
Yo si compro en el mercado porque sé que en esos lados,
se come la mejor fruta sin que te vendan viruta.

No sentís como se mueve, cuando hay sol y cuando llueve.
Hay que poder ver lo que uno quiere ser,
en el tiempo que hoy corre el mañana es el ayer.